Si tienes un trabajo remoto, deja de hacerlo a solas y dale una nueva oportunidad a un lomito. En DinDong.work te presentamos a los mejores compañeros de Home Office: Día del perro adoptado. Esta conmemoración está fechada internacionalmente hoy, 23 de septiembre y no podíamos dejarla pasar, ¡guau!
En las calles, refugios, y hasta en algunas casas, hay cientos de animales que necesitan una familia. Si estás en posibilidades de brindársela a alguno, no lo dudes más; ten por seguro que este será un rescate mutuo. Y si lo que te detiene es pensar que te va a hacer ruido de fondo en tus juntas por Zoom, no te preocupes, que lo compensan con mucho amor.
Si aún dudas de que sean una buena compañía, permíteme compartirte algunas de las realidades y beneficios que podrías experimentar. En primer lugar, si tienes muchas entregas pendientes, no te preocupes, porque aún así no te abandonan. Ya sea sentados en tus piernas, durmiendo a tu lado, o simplemente echándote un vistazo de vez en cuando, se harán presentes. Y si no vives con nadie más, todo esto ayuda a reducir el sentimiento de soledad durante y fuera de tu jornada de trabajo. La fidelidad es una de sus mejores cualidades.
También te sugerimos leer: Tips de organización para mejorar tu vida.
Y la lealtad también, porque si algo no va bien, siempre intentarán subir el ánimo. Y es que los perros son súper perceptivos, ya sea que te estreses o te molestes, con su nariz húmeda te traerán de vuelta a la realidad. Esto pasa, porque son geniales para ayudarte a gestionar tus emociones. Incluso, puede que con ello te recuerden que necesitas tomarte un descanso para estirar las piernas, tomar agua y comer algo.
En ese sentido, te permitirán darte un respiro y te invitarán a mantenerte activo. Porque sí, no te voy a mentir, implica varias responsabilidades, como sacarlos a pasear. Sin embargo, este también puede ser tu momento de desconexión; que te toque el aire fresco en la cara, y caminar. No sólo es su paseo, sino una oportunidad que ambos tienen para conectar y divertirse. Créeme, estos momentos son un regalo. Puede que si los llevas a un parque, hasta te impulsen a socializar con otros dueños.
Otro punto a resaltar es que te sorprenderá cuán inteligentes y ocurrentes pueden llegar a ser. Te sacarán más de una sonrisa corriendo por la pelota, durmiendo en posiciones extrañas, aullando de la nada, o intentando cazar una mosca. Así es esto, en medio de ladridos y pelos por doquier. Ah, y la mejor parte, es que estos no se miden las manos con tu novio, ni son el picacostillas 3000, guiño, guiño.